En 1927 y sobre Corrientes angosta al 1600 un gallego
puso un negocios de especias al que llamó La Martinica, un año
después decidió trasladarlo a unos pocos
metros un lugar mas elegante al que
llamó El Gato Negro en honor a un café romántico de Madrid ubicado en a Avenida
De Alcala donde Jacinto Benavente era habitué
Famosa en Buenos Aires por sus especias, cafés y tés, esta casa mantiene intacto el incomparable estilo de un almacén elegante: mostradores y vitrinas de roble y fresno Italiano, arañas holandesas de bronce, sillas Thonet, expertos y muy amables vendedores. Ante ésta inmaculada disposición y exhibición de semillas y hierbas aromáticas, condimentos, sales dietéticas y especias en frascos y especieros de porcelana, y una selección de chocolates, salsas, frutas glaseadas y pescados envasados, tés y cafés de primera calidad que son tostados artesanalmente en el mismo local y con la misma tostadora de entonces, el cliente puede echar a volar su imaginación y soñar que está en Amsterdam o en Londres.
Aquí tambien hay lugar para
tomar un rico, café al salón lo preside
un cuadro con el símbolo de la casa y un
reloj de muy bella campanada
No se puede uno resistir a
comprar algo tienen el mas sabroso pimentón español de Buenos Aires y las ramas de canela mas
robustas
Estos cafés notables me
resultan adictivos esa misma tarde recorrimos tres La Academia , El Gato Negro
y La Giralda
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